November 2010 Archives

Jueves 25 de Noviembre 2010

Un estudio austríaco en un modelo animal demuestra que la hipercolesterolemia crónica causa pérdida de memoria, inflamación, disfunción colinérgica y un aumento de beta-amiloide en la zona cortical.

 
Una dieta rica en colesterol produce daños cerebrales similares a los de la enfermedad de Alzheimer, según un estudio realizado en ratas por investigadores del Laboratorio de Psiquiatría e Investigación Experimental en Alzheimer de la Universidad Médica de Innsbruck, Austria, publicado en la revista Molecular and Cellular Neuroscience.
Esta investigación fue liderada por el doctor Christian Humpel en colaboración con los estudiantes de su laboratorio Celine Ullrich y Michael Pirchl. Su objetivo era estudiar los efectos de la hipercolesterolemia en ratas adultas, para lo que alimentaron a ratas macho de seis meses de edad con comida normal (grupo de control) o con una dieta con un 5% más de colesterol (hipercolesterolemia).
Después de cinco meses, los investigadores buscaron en estos animales posibles daños conductuales y marcadores patológicos similares a los que se dan en el cerebro de los pacientes con Alzheimer. Los resultados demostraron que la hipercolesterolemia crónica causa pérdida de memoria, inflamación, disfunción colinérgica y un aumento de la proteína beta-amiloide en la zona cortical, todos ellos síntomas similares a los del Alzheimer.
A pesar de que los últimos datos van en la misma línea y varios estudios recientes han demostrado que el colesterol puede participar en el desarrollo del Alzheimer -desde que esta enfermedad se ha catalogado como una patología compleja y heterogénea-, estos datos no permitían llegar a la conclusión de que el colesterol solo es responsable de esta enfermedad.
Sin embargo, se puede especular con que los daños crónicos en el cerebro causados y potenciados por diferentes factores de riesgo vascular -entre los que se incluye el colesterol- pueden contribuir a la aparición de esta patología.
Futuros estudios deben determinar cómo leves sangrados microvasculares crónicos, ictus silentes y daños leves en el cerebro durante décadas pueden jugar un papel en el desarrollo de esta enfermedad. Diversos datos avalan la hipótesis de que el Alzheimer, una enfermedad que en 2025 podrían sufrir 80 millones de personas en todo el mundo, es, en realidad una enfermedad vascular.


 Jueves 25 de Noviembre 2010

Una investigación halló que en estos casos, los tumores diagnosticados eran más pequeños y menos agresivos que los de las mujeres evaluadas a las edades habituales.

 

Un estudio reciente, de la Barts and London School of Medicine and Dentistry, Reino Unido, señala que las mamografías practicadas a las mujeres menores de 50 años que tienen antecedentes familiares moderados de cáncer de mama, pueden detectar carcinomas tempranamente e incrementar las probabilidades de supervivencia a largo plazo.

Según publica The Lancet Oncology, investigadores británicos examinaron los resultados de mamografías de 6.710 mujeres que tenían varias parientes con cáncer de mama o al menos una pariente a la que se había diagnosticado la enfermedad antes de los 40 años. Hallaron que a 136 mujeres se les diagnosticó el tumor entre 2003 y 2007.

Estas mujeres, que según los investigadores probablemente no portaban un gen del cáncer de mama mutado BRCA, comenzaron a recibir mamografías a una edad anterior a la recomendada por el National Health Service del Reino Unido, que actualmente ofrece evaluaciones cada tres años a las mujeres de entre 50 y 70 años.

Según los investigadores, los hallazgos mostraron que los tumores eran más pequeños y menos agresivos que los de las mujeres evaluadas a las edades habituales. Además, estas mujeres tenían más probabilidades de estar vivas 10 años después del diagnóstico de cáncer invasivo.

"No nos sorprenden del todo los hallazgos", aseguró el investigador principal, el Prof. Stephen. "Ya existe evidencia de que la evaluación con mamografía de la población para las mujeres menores de 50 año es un poco menos efectiva que a edades posteriores. Sin embargo, las mujeres que tienen antecedentes familiares presentan tejido mamario más denso, lo que dificulta las mamografías, por lo que no estamos seguros de que haya que esperar", anotó el Prof. Duffy. "No excluimos de manera explícita a las mujeres BRCA positivas", agregó, "aunque muy pocas de las que tienen una mutación identificada fueron reclutadas. Debido a que las mujeres tenían antecedentes familiares moderados en lugar de extensos, sospechamos que hubo muy pocos casos entre la enorme mayoría en la que no se evaluaron las mutaciones".

Debate en Estados Unidos

El Prof. Duffy comparó sus hallazgos con el debate actual entre expertos sanitarios estadounidenses, que no se ponen de acuerdo sobre si las mamografías anuales son necesarias a partir de los 40 años, lo que ha sido el estándar durante años. En noviembre de 2009, el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de Estados Unidos causo una cierta indignación cuando revisó sus recomendaciones acerca de las mamografías y sugirió que podían esperar hasta los 50 años y luego realizarse con un año de por medio.

"Aquí hay dos asuntos", según el Prof. Duffy. "El primero es que existe algo de evidencia de beneficios en mortalidad con las evaluaciones de mujeres entre los 40 y los 50 años, aunque un poco menos que con mujeres mayores. El segundo es que nuestro estudio no se relaciona con la evaluación de la población sino con la vigilancia mamográfica de mujeres preocupadas por sus antecedentes familiares de cáncer de mama o de ovario", explicó. "Este segundo problema es menos controvertido", agregó. "Existe un debate en el Reino Unido sobre la edad de inicio de evaluaciones en la población general, aunque hay menos controversia sobre la vigilancia antes para las mujeres que tienen antecedentes familiares de cáncer de mama".

Para el estudio, se reclutó a mujeres de 76 centros de salud de 34 redes de investigación oncológica, 91% de las cuales tenían entre 40 y 44 años, al comienzo del estudio. La edad promedio de las mujeres era de 42 años. Poco menos de la mitad tenía una pariente a la que se había diagnosticado cáncer de mama antes de los 40 años.

Cerca del 77% de los casos de cáncer de mama diagnosticados en el estudio se detectaron durante la evaluación, lo que da a las mamografías preliminares un índice de sensibilidad de 79%. Los investigadores predijeron un promedio de supervivencia a 10 años de 81% entre las participantes, mientras que los índices de supervivencia para las de los grupos de control fueron predichos en no más de 73%.



Martes 23 de Noviembre 2010

Expertos internacionales se reunieron en un simposio para compartir las nuevas evidencias sobre los beneficios de estos ácidos grasos en la prevención de enfermedades cardiovasculares.

 
 

(de izq. a dcha) Sr. Aquilino García, Dr. José María Ordovás, Dr. Xavier Pintó, Dr. Pedro Mata y Dr. Gerard Bannenberg, durante la inauguración del congreso.

El consumo de ácidos grasos Omega-3 puede proteger frente a enfermedades relacionadas con los procesos inflamatorios, tales como patologías neurodegenerativas y determinados tipos de càncer, como el de próstata, colon y mama.
Así lo afirman recientes estudios presentados en el marco del simposio Los Omega-3: en la salud y en la enfermedad, celebrado recientemente, que contó con la presencia de prestigiosos investigadores del Karolinska Institute de Suecia, de la Universidad de Harvard o la Tufts University Medical Center, ambos en Estados Unidos, además de representantes de varias instituciones nacionales. El simposio, en el que se compartieron las últimas investigaciones sobre los ácidos grasos Omega-3, aportó nuevas evidencias también sobre los beneficios de estos ácidos grasos para prevenir enfermedades cardiovasculares.
De los estudios realizados se desprende también que la cantidad y la calidad de los ácidos grasos Omega-3 son determinantes en cuanto a su efectividad en la prevención de las enfermedades. En este sentido, los expertos apuntan a la necesidad de disponer de suplementos purificados y de alta calidad, exentos de contaminantes, como requisito imprescindible para su uso extensivo en la práctica clínica.
Prevención a través de la dieta
Según investigaciones recientes, las acciones antiinflamatorias de los ácidos grasos Omega-3 provienen de su capacidad para infuir en mecanismos moleculares que disminuyen la capacidad proliferativa celular y la síntesis de sustancias mediadoras en los procesos inflamatorios. Además, los ácidos grasos Omega-3 podrían favorecer la muerte de determinadas células que intervienen en el desarrollo del cáncer.
 A este respecto, a partir de estudios con modelos animales de cáncer de próstata, el Dr. Kenneth Honn, Profesor del Departamento de Patología y Química en la Wayne State University Medical School, constató que los ácidos grasos Omega-3 consiguen modular las enzimas implicadas en el desarrollo de la inflamación y de cánceres como el de próstata. Así, Honn apuntó los potenciales efectos positivos de las dietas suplementadas con Omega-3.
Respecto a la prevención de las enfermedades cardiovasculares, primera causa de muerte por enfermedad en España, el Dr. Emilio Ros, Jefe de la Unidad de Lípidos del Hospital Clínic de Barcelona y miembro del CIBER de Obesidad y Nutrición, también señaló la evidencia de estudios prospectivos y clínicos que sugieren que con dosis diarias de 0,5 a 1,8 g de ácidos grasos Omega-3 EPA y/o DHA, es posible reducir significativamente los episodios cardíacos isquémicos, entre otros mecanismos, porque ayudan a mantener los niveles de presión arterial dentro de los límites normales.
Por su parte, el Dr. Jaume Dalmau, Jefe de la Sección de la Unidad de Nutrición y Metabolopatías del Hospital Infantil La Fe de Valencia, sostuvo que los ácidos grasos Omega-3 ejercen efectos beneficiosos en la infancia y adolescencia, como el desarrollo de una óptima agudeza visual y la prevención de enfermedades cardiovasculares, y pueden contribuir a un mejor desarrollo cognitivo en niños prematuros y recién nacidos.
Para conseguir un efecto preventivo real, estudios recientes sostienen que es clave tomar estos ácidos grasos Omega-3 con una concentración de 70-80% de EPA y DHA y una ingesta mínima de 1 g diario de estos ácidos grasos. Estos ácidos grasos no los puede producir el organismo humano y deben ser incorporados a través de la dieta, fundamentalmente con el consumo de pescado azul.
El congreso estuvo organizado por Expertomega3, una plataforma impulsada por Ferrer y Solutex para promover la investigación en Omega-3.

Martes 23 de Noviembre 2010

Los urólogos alertan de la relación entre la nicotina y la incapacidad del varón para tener una erección, debido a los efectos vasoconstrictores de esta sustancia.

 
 

Una de las imágenes que las tabacaleras deberán incluir en las cajetillas de tabaco.

Entre las consecuencias negativas que comporta el tabaquismo, algunas tienen incidencia en la salud sexual de los hombres. Así lo advierte la Asociación Española de Urología (AEU), quien afirma que más del 60% de los fumadores acaba presentando disfunción eréctil y casi la mitad (entre un 30 y 40%) tiene problemas de fertilidad.
Según explica el doctor Ignacio Moncada, coordinador del Grupo de Andrología de la AEU, las personas que han fumado durante muchos años tienen "cambios en el sistema cardiovascular que son irreversibles" y afectan también a su función sexual.
La nicotina está directamente relacionada con la incapacidad del varón para tener una erección, ya que esta sustancia actúa como vasoconstrictor, disminuyendo el flujo sanguíneo hacia el pene. "Pero al mismo tiempo, el tabaco incrementa el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular, al mismo nivel que otros factores como la hipertensión, la diabetes o el colesterol", destaca este experto.
Del mismo modo, también se deteriora la producción de espermatozoides y, según asegura este experto, está comprobado que los fumadores tienen una concentración menor, "sobre todo aquellos que consumen más de 20 cigarrillos al día".
Mayor riesgo de càncer renal y de vejiga
Además de este riesgo, la AEU recuerda que el tabaco incrementa en un 35% el riesgo de desarrollar un tumor renal y es la causa principal en el 80% de los tumores de vejiga, porcentajes que son mayores en función del número de años fumando y de cigarrillos consumidos.
"La relación entre tabaco y cáncer es muy clara en el tumor de vejiga ya que, al ser un órgano de almacenamiento, las sustancias cancerígenas derivadas del tabaco permanecen más tiempo en contacto con esta zona hasta que se expulsan a través de la orina", explica el coordinador del Grupo de Urología Oncológica de la AEU, Bernardino Miñana.
En el caso del cáncer de vejiga, también es muy importante tener en cuenta los riesgos del tabaquismo pasivo, añade este experto, ya que en el caso del cáncer de vejiga "también es frecuente diagnosticar este tumor en personas que no fuman pero que están expuestas al humo del tabaco", como es el caso de los camareros o las parejas de grandes fumadores.

Lunes 22 de Noviembre 2010

Los resultados de un metanálisis publicado recientemente en 'The Lancet' abren la posibilidad de utilizar este fármaco centenario para prevenir este tipo de tumor, en combinación con el cribado mediante sigmoidoscopia.

 
El consumo de aspirina a dosis bajas durante años reduce el riesgo de cáncer de colon a largo plazo, según un estudio dirigido por el Dr. Peter Rothwell, de la Universidad de Oxford, Reino Unido .
El grupo de investigadores realizó un seguimiento durante 20 años de los pacientes incluidos en cinco ensayos clínicos realizados con ácido acetilsalicílico en prevención primaria (Thrombosis Prevention Trial, British Doctors Aspirin Tria) y secundaria (Swedish Aspirin Low Dose Trial, UK-TIA Aspirin Trial) en la prevención de eventos cardiovasculares. Cuatro de los cinco estudios compararon ácido acetilsalicílico con placebo, excepto uno de ellos que comparó distintas dosis de ácido acetilsalicílico (Dutch TIA Aspirin Trial).
El objetivo de este metanálisis fue valorar el efecto a largo plazo del ácido acetilsalicílico a dosis bajas (75-300 mg) sobre la reducción en la incidencia y mortalidad de cáncer de colon en función de la dosis empleada, la duración del tratamiento y la localización del tumor.
Los mismos autores ya habían comprobado con anterioridad en dos ensayos clínicos que altas dosis de ácido acetilsalicílico (≥500 mg/día) reducían el riesgo de cáncer de colon. No obstante, los efectos adversos asociados al empleo de altas dosis (elevado riesgo de sangrado: hemorragia digestiva, úlceras péptica) limitaba el potencial de este tratamiento en la prevención del cáncer de colon. Por aquel entonces, se desconocía el efecto que tendría el empleo de dosis inferiores de ácido acetilsalicílico. No obstante, la situación puede cambiar una vez se pruebe que dosis mucho más bajas de ácido acetilsalicílico también disminuyen el riesgo de cáncer de colon de forma significativa pero con un menor riesgo de hemorragia.
Los cuatro ensayos clínicos analizados en este metanálisis, en los que se comparó el ácido acetilsalicílico con placebo, recogen datos de más de 14.000 pacientes seguidos durante una media de tratamiento de 6 años. El tratamiento con ácido acetilsalicílico a dosis bajas redujo el riesgo de cáncer de colon a 20 años (incidencia p = 0,02, mortalidad p=0,05). Esta reducción fue debida principalmente a una reducción en el cáncer de colon proximal.
Tratamiento más largo, mayor beneficio
Los resultados del metanálisis mostraron, además, que los beneficios del ácido acetilsalicílico son mayores al incrementarse el tiempo de tratamiento, de modo que en aquellos pacientes que recibieron ácido acetilsalicílico durante 5 años o más, la reducción del riesgo de cáncer de colon proximal se asoció a una disminución del riesgo de estos tumores cercana al 70%.
Otro dato a destacar guarda relación con la dosis empleada no observándose un mayor beneficio, en términos de reducción del riesgo de cáncer de colon a 20 años, con el empleo de dosis mayores a 75 mg/día.
El metanálisis concluye que el tratamiento con ácido acetilsalicílico a dosis bajas (como mínimo 75 mg/día) durante años reduce la incidencia y mortalidad de cáncer de colon a largo plazo.
Gran parte del interés de este dato reside en que los tumores del colon proximal no pueden prevenirse de forma efectiva mediante el cribado con sigmoidoscopia o colonoscopia. Estas pruebas permiten detectar y prevenir precisamente los tumores distales. Por este motivo, los autores consideran que los dos tipos de intervención -ácido acetilsalicílico y sigmoidoscopia- pueden complementarse. "Un efecto particular de aspirina sobre los tumores más agresivos y que crecen más rápido puede permitir cribados menos frecuentes -escriben-, y la prevención de tumores en el colon proximal mediante ácido acetilsalicílico, que no pueden identificarse con la sigmoidoscopia, es claramente importante. Por lo tanto, es probable que estos dos enfoques para la prevención del cáncer colorrectal sean sinérgicos".
Las implicaciones clínicas de este estudio son destacables, tal como resumen en un editorial que acompaña el artículo de The Lancet, los Dres. Robert Benamouzig y Bernard Uzzan, del Avicenne Hospital de Bobigny, Francia. Escriben que "este interesante estudio puede incitar a los clínicos a volver a la prevención primaria del cáncer colorrectal con aspirina, al menos en poblaciones de alto riesgo". Opinan que, de confirmarse el efecto profiláctico del fármaco sobre los tumores del colon proximal, el hallazgo puede constituir un fuerte argumento para la adición de la quimioprevención con ácido acetilsalicílico al cribado mediante sigmoidoscopia. "La elaboración de directrices específicas serían el siguiente paso lógico", concluyen.

Lunes 22 de Noviembre 2010

Una investigación de la UAM demuestra que los péptidos obtenidos tras la hidrólisis enzimática de proteínas de la clara de huevo producen un efecto vasodilatador directo en las arterias de resistencia.

 
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha demostrado que los péptidos obtenidos tras la hidrólisis enzimática de proteínas de la clara de huevo producen un efecto vasodilatador directo en las arterias de resistencia, llegando a producir, en algún caso, hasta un 70% de relajación arterial.
La investigación, publicada en Journal of the Science of Food and Agriculture, tuvo como objetivo investigar el efecto de varios péptidos, obtenidos a partir de un hidrolizado de proteínas de la clara de huevo, sobre la función vascular en arterias de resistencia de animales normotensos y dilucidar su mecanismo de acción.
Asimismo, los científicos españoles intentaron establecer una relación entre la posición de determinados aminoácidos en la secuencia del péptido y el efecto vascular. De este modo, los investigadores encontraron que la posición de determinados aminoácidos en la secuencia de los péptidos parece ser importante para el desarrollo de sus respuestas fisiológicas y para la activación de los distintos mecanismos que dan lugar al efecto vasodilatador.
No obstante, apuntan los autores, será necesario profundizar en el estudio de las vías moleculares implicadas en el efecto vasodilatador de estos péptidos, y llevar a cabo un estudio de su efecto sobre arterias de resistencia de modelos de hipertensión para poder pensar en utilizarlos como ingredientes en alimentos funcionales útiles en la prevención o el tratamiento de la hipertensión arterial.


Hola familia, amigos y pacientes en general.

Acá les dejo una página web excelente, creada por laboratorios MSD.

Este portal les ayudará a:

1) Mejorar la comunicación con su médico

2) Ir mejor preparado a la consulta médica

3) Tomar mejores decisiones y tener mayor control sobre sus condiciones de salud.

 

  Este portal les brinda información de salud, consejos prácticas y muchas ideas para el mejor manejo de su salud que lo ayudarán a llevar una vida más sana y a mantener una comunicación fluida y práctica con su médico.

 

 http://www.yoymidoctor.com/web/index.php

 

golosinas

Las chucherías están tan instaladas en el día a día de muchos niños y familias que en muchas ocasiones las consideramos un alimento más. Sin embargo, las chucherías deberían ser un "alimento" ocasional debido a sus características nutricionales.

Bien dulces o bien saladas, las chucherías que suelen constituir tentempiés, aperitivos o postres, cuentan con una composición que no las hace demasiado recomendables. Caramelos, regalices, chicles, patatillas... se sitúan en lo alto de la pirámide nutricional, donde aparecen los alimentos superfluos y ocasionales.

Éstos son diez datos sobre las chucherías que deberíamos tener en cuenta antes de ofrecer un caramelo o un aperitivo salado a los niños.

1)  Las golosinas aportan mucha energía, pero pocos nutrientes. Por eso, a veces se dice que son "calorías vacías", es decir, que ayudan a aumentar de peso pero no a crecer. Por ello, es preferible elegir otros alimentos que el organismo de los pequeños necesita para crecer saludablemente.

2)  No aportan nutrientes esenciales. Su contenido proteico es pobre y lo mismo puede decirse del contenido en vitaminas o minerales que es prácticamente inexistente o poco significativo.

3)  Además, en las chucherías suelen emplearse sustancias añadidas que contribuyen a aumentar su atractivo (sabor, color...). Estos aditivos en ocasiones son de dudosa calidad y procedencia.

4)  Algunas chucherías presumen de su contenido en leche (barritas o dulces de chocolate con leche...) pero, aunque la contengan, muchas veces va acompañada de gran cantidad de grasa y azúcar.

5)  Las chucherías hacen disminuir el apetito a la hora de las comidas. Por ello son especialmente perjudiciales en los niños poco comientes.

6)  Las chucherías saladas tampoco son saludables. Los aperitivos salados son productos hechos generalmente a base de cereales, con cantidades variables de grasa y sal. Su composición nutricional suele incluir una pequeña cantidad de proteínas, alrededor de un 45% de hidratos de carbono y de un 50% de grasas, en algunos casos poco saludables.

7)  Como hemos señalado en la introducción, deben consumirse sólo de forma ocasional. Si acaso, se puede tratar de fijar un día especial, como las fiestas o cumpleaños, o elegir los fines de semana como momento en el que se permita comerlas. Aunque tampoco conviene que se utilicen como un premio.

8)  De acuerdo, vamos a comer golosinas. Pero no queremos acordarnos de ello pronto en el dentista... Hay que asegurarse de que los dientes se lavan también y especialmente después de comer golosinas, no sólo después de las comidas, pues su alto contenido en azúcar hace que constituyan un riesgo de caries. Y es que las chucherías contienen, en muchas ocasiones, azúcares simples. Estos azúcares son fermentados por las bacterias de la placa dental y contribuyen a la formación de caries.

9)  Es conveniente que los adultos limiten la cantidad de golosinas y aperitivos salados que se comen en su familia. Hay que acostumbrar a los niños a que no gasten el dinero en golosinas o no las acepten de desconocidos.

10)  Una regla de oro consiste en no tenerlas en casa que junto a la otra regla, la de dar ejemplo como padres, ayudará a que las chuches no sean vistas como algo habitual.

Las chucherías y golosinas han empezado a preocuparme, en el sentido de que veo que están al alcance de mi hija mayor muy a menudo. Pero tampoco es una obsesión, y me gusta saber que somos sus padres los que controlan el acceso a las chuches (casi siempre), y que la estamos educando para que entienda que no son lo mejor para ella, que las tiene que consumir con moderación por su salud, y que existen otras alternativas deliciosas.

Por ello me recuerdo a mí misma estos diez datos que todos deberíamos saber sobre las chucherías que probablemente también interesarán a otros padres

About this Archive

This page is an archive of entries from November 2010 listed from newest to oldest.

October 2010 is the previous archive.

December 2010 is the next archive.

Find recent content on the main index or look in the archives to find all content.